jueves, 29 de junio de 2017










El programa Duelo por México sigue creciendo… 
acompañando a personas y familias que están en duelo por la muerte  de un ser querido.




Con un donativo de tan solo 100 pesos al mes ayudarás a que este año miles de personas de todo el país reciban apoyo psicológico en un momento clave para seguir adelante con sus vidas, inclusive quienes por falta de recursos no podrían.


TODOS CONOCEMOS A ALGUIEN QUE PODRÍA BENEFICIARSE…


*Si quieres mas información o hacer un donativo envíanos tu nombre y teléfono a duelopormexico@gmail.com, por nuestra página de Facebook https://www.facebook.com/duelopormexico/, por la web www.duelopormexico.org.mx o por whatsapp al 3318948600*

En nombre de la comunidad y de las personas que al día de hoy ya han recibido apoyo profesional, el equipo de Duelo  por México agradece tu apoyo. 

Atentamente,

Dr. Adrián Chaurand Morales, PhD.
Director del Programa

martes, 12 de enero de 2016

Pérdidas difíciles de comprender. Los procesos de duelo ante cambios positivos.


En ocasiones ganar implica perder … 

En la vida, los procesos de cambio a pesar de que sean para bien siempre implican pérdidas, en ocasiones difíciles de asimilar. 

Son varios los ejemplos que puedo mencionar de procesos de duelo que para la gente que no los vive son difíciles de comprender y para quien los vive en ocasiones difíciles de aceptar. 

¿Cómo es que me siento triste por mi antiguo trabajo si es que ahora tengo un mejor puesto y me pagan mejor?

¿Cómo puedo extrañar mi panza, mis visitas al médico, al hecho de estar embarazada si ya tengo a mi bebé conmigo? 

 “Quién la entiende, se cambió a una casa mas grande y mas bonita y extraña la anterior”…  

¿Por que no disfruto de la carrera que estudio y que siempre soñé y sigo extrañando a mis amigos de la prepa, inclusive los exámenes?    
                                                                        

¿Que queda por hacer?
                                                                                                 
  A quienes no vivimos el proceso nos queda acompañar a las personas que queremos, sin preocuparnos comprender que estar en duelo no significa que nuestros seres queridos no disfruten de la alegría del presente, sino que también echan de menos las alegrías del pasado y se están ajustando a los cambios. 
                                                                         
A quienes vivimos el proceso nos toca darnos el permiso de estar en duelo, sin pelear con el porqué nos sentimos de esta manera, así como pedir la comprensión a los demás por lo que hemos perdido, compartirles tanto las tristezas como las alegrías, tanto las dificultades como los avances.

martes, 20 de enero de 2015

No somos egoístas si no queremos que muera

Por mucho que nos preparemos, nunca estaremos listos para el dolor de la pérdida de un ser querido. 

El dolor de la pérdida es el dolor del cambio en la relación con quien ya no está, con lo que nos hacía sentir y con quienes nosotros éramos cuando esa persona se encontraba a nuestro alrededor. 

No somos egoístas si no lo queremos dejar partir, no somos egoístas cuando no queremos creer que se ha ido; somos quienes saben lo que esa persona daba al mundo con tan sólo estar en él, somos quienes luchan por que el mundo no pierda lo que en el intentó dejar; somos parte de su esencia; Somos las personas en duelo, quienes en honor a los que ya no están nos transformamos, intentando que sus huellas sigan marcadas en el universo.

Los pequeños pasos en el proceso de duelo




Aunque compartamos la pérdida de un ser querido con otras personas, nuestro sentimiento es único, pues nuestra relación con él fue única… 

Es importante pensar cada día al despertar como le gustaría vernos, como nos gustaría vernos…. 

Entonces, tal como lo hace un bebé que empieza a andar, hemos de dar uno o dos pasos, uno o dos; sin intentar dar más de los que seamos capaces. 

Habrá días en que posiblemente ni pasos demos y tan sólo podamos mantenernos en pie, no importa, eso es lo que podemos... eso es nuestra fuerza, no nos presionemos.

Sin embargo, lo que no podemos dejar atrás es el pensar en hacerle feliz donde quiera que esté, el pensar en que con esa fuerza, con esa motivación; algún día, dentro de nosotros le volveremos a encontrar con la misma fuerza que nos daba antes de partir.

martes, 5 de noviembre de 2013

Familiares, amigos y personas en duelo.

 Un factor muy importante durante el  duelo de una persona es sentirse respetado en sus necesidades y en su manera de vivir dicho proceso. 
 
Esto en ocasiones es difícil de comprender para aquellos seres queridos que se encuentran cerca, en general por desconocimiento y por el deseo de que su ser querido se esfuerce en mejorar. 
Sin embargo el duelo lleva tiempo, requiere mucho apoyo y comprensión de las personas de alrededor, de nada sirve apurar o forzar los cambios, sirve más el respeto, la atención y el cariño.
El siguiente escrito es un breve pero muy significativo texto que en ocasiones considero importante compartir con mis pacientes, para que ellos de creerlo necesario lo compartan con sus familiares y amigos. 
Este escrito es un reflejo del alma de aquellos que durante su duelo agradecerían un poco más de entendimiento y compañía sin juicios.
 
ACOMPÁÑAME EN MI DUELO

Por favor sé gentil conmigo,
porque estoy haciendo mi duelo.

El mar en el que nado es solitario
y las costas parecen estar lejanas. 

Cuando intento enfrentar cada día
ondas de dolor empañan mi alma. 

Acompáñame y comparte mis lágrimas,
siéntate manteniendo silencio que me dé calor. 

Respeta en que tramo de mi viaje estoy,
y no en dónde tú supones que debería estar.

Necesito tu soporte y tu comprensión,
no hay modo bueno o malo para hacer el duelo,
yo tengo que encontrar mi propio camino. 

Por favor: dime que vas a ser capaz de caminar a mi lado.

JILL B. ENGLAR

viernes, 19 de abril de 2013

"Actuar raro" durante el duelo es normal

LA IMPORTANCIA DE COMPRENDER Y NO JUZGAR A UNA PERSONA QUE VIVE SU PROCESO DE DUELO



"Mi marido cree que me estoy volviendo loca", me decía una paciente mientras me contaba que en los últimos meses desde que su madre murió ha hecho muchos cambios en la casa: ha pintado una habitación entera, ha modificado los muebles del lugar donde su madre los tenía, ha guardado toda su ropa, ha pintado varios cuadros y ha realizado muchas pero muchas más actividades. Este, es tan solo un ejemplo de como las personas podemos reaccionar ante el dolor de la pérdida de un ser querido.

"Si dejo de hacer cosas me vengo abajo", ella me comentaba.

Sin embargo, aún realizando dichas actividades el dolor de la pérdida seguía ahí, lloraba constantemente y la ansiedad que estaba padeciendo no le permitía dormir y la hacía levantarse sintiéndose asfixiada y sobretodo "sola", la vida para ella en ese momento no tenía ningún sentido.

Otras personas en cambio podrían vivir su duelo de forma muy distinta, por ejemplo, al llorar  constantemente, al no levantarse de la cama o del sofá, no querer ver a nadie,  no realizar ninguna actividad, etc...

Es importante que quienes están a nuestro alrededor comprendan que durante un largo periodo de tiempo, estaremos en duelo.  Que durante dicho periodo cualquier reacción, comportamiento o pensamiento que yo pueda tener es comprensible y que no me hace daño ni me lo hará en el futuro... 

Todas y cada una de las respuestas por muy incomprensibles o fuera de lo común que pudieran parecer, son un intento de mi propio ser por intentar estar lo más estable y lo mejor dentro de lo mal que me estoy sintiendo. Todos son actos que deben de ser comprendidos sin juicio y entendidos como un esfuerzo de mejorar, "de mantenerme estable", estos actos son en este momento...     
                       "Lo mejor que puedo hacer"...


(Todas estas respuestas como ya decía son aceptables, excepto aquellas ideas y/o actos que me puedan llevar a dañarme físicamente, a dañar a cualquier otra persona, o que me inciten al suicidio. Si esto sucede, si existieran ideas de suicidio o de hacer daño a alguien más será necesario buscar ayuda de forma inmediata, avisarlo a alguien de confianza y/o llamar o visitar algún centro de salud o médico especialista. Si las ideas están presentándose constantemente el primer paso puede ser ir  o llamar a urgencias o a nuestro médico de mayor confianza (médico privado, médico de cabecera).


Debajo escribo un listado de cosas que aunque parecieran no ser comunes pueden aparecer ante la pérdida de un ser querido, y que más que extrañas como lo hemos comentado, son intentos de mantenernos bien dentro del dolor de haber perdido a una persona importante para nosotros:

Espero que de alguna manera el ver dichas respuestas aquí escritas, te pueda ayudar a comprender si es que has experimentado algo semejante, que lo que te sucede no es malo, raro, extraño o fuera de lo común como probablemente pudiste haber llegado a pensar o como probablemente alguien a tu alrededor lo cataloga, espero que esta breve entrada del blog pueda ayudarte tanto a ti, como si fuera necesario a algún ser querido tuyo para poder comprender las cosas que debido a la muerte de tu ser querido te pudieran estar sucediendo.

                                                                    Mis mejores deseos en este difícil proceso,

       
                                                                                           Adrian Chaurand.



Ejemplos existen muchos y muy distintos:



- Hablar con la fotografia de mi ser querido, darle besos, acariciarla como si lo estuviera haciendo a el/ella.
- Dejar sin mover las cosas mas significativas que tenía, su cartera, un abrigo, su vieja bolsa, un bastón, su rifle, zapatos de fútbol, las cosas con las que cocinaba.
- No poder sentarme en el lugar en el que se sentaba, sentir que pudiera apachurrarlo/a como si estuviera ahí.
- Llorar constantemente o todo el dia o por el contrario nunca llorar.
- Hablar de el/ella constantemente.
- Ir ala iglesia todos los días o muy a menudo.
- Acariciar el lugar en donde dormía o su almohada
- Oler sus cosas.
-Trabajar todo el día. Tener ocupado todo mi tiempo.
- No estar nunca por casa.
- Enfadarme con Dios (perder la fe, decirle cosas malas)
- Golpear cosas.
- Estar constantemente irritable.
- No poder escuchar la radio o ver la TV, por los recuerdos o simplemente por que me afecta.
- No querer escuchar sonrisas o niños jugando.
- Evitar interactuar con los demás.
- Sentirme como si estuviera desconectado, atontado, como en una película, como si fuera un zombie.
-Olvidarme constantemente de las cosas.
- Sentirme enfadado, triste, desconcertado, etc. todo en un par de minutos.
- Sentir que una parte de mi ya no está.
- Dejar de preocuparme por las personas que siempre me han importado
- No gastarme las monedas que dejo en su pantalón
- No lavar ropa que había utilizado.
- Pedirle que por favor se presente de alguna forma espiritual o mediante otros objetos.
- Molestarme si alguien usa sus cosas, entra a su habitación.
- Enfadarme si me hablan de él.
- Sentir como si estuviera presente, que se sienta en la cama.
-Verlo parado frente a mí.
- Escuchar su voz.
- No pode manejar por que lo veo o lo siento en el asiento del copiloto.
- No poder mover o tocar su coche, moto, su computadora (ordenador).
- Sentir bultos, dolores, síntomas físicos, estreñimiento, que tenía el constantemente o que sufrió antes de morir.
- Sentir que si me río o si me pongo bien es como si lo olvidara.
- Pensar que sería mejor que hubiera muerto alguien más o que es injusto que haya partido.
- Abrir la puerta de casa y buscarlo/a en su habitación.
- Evitar ir a los lugares que me lo/la recuerdan.
- Visitar todos los días el cementerio o cualquier lugar que me recuerde o que a el/ ella le gustaba
- tocar u oler la ropa interior
- Ver los programas de tv que a el le gustaban pero a mi no.
- Llevar consigo un amuleto o algo de valor para el/ella.
- Buscar sexo o relaciones pasajeras, o por el contrario evitar por completo la posibilidad de cualquiera de las dos.
- Evitar festejos o reuniones familiares
- Comer mucho,


¿Le gustaría a alguien más añadir alguna experiencia propia?


Recuerden que cualquier respuesta en el duelo por extraña que parezca es un intento de salir adelante, los ánimo a que compartan...


lunes, 19 de noviembre de 2012

La Seguridad para las personas en duelo






LA IMPORTANCIA DE BRINDAR UN ESPACIO SEGURO 
PARA LAS PERSONAS EN DUELO




La principal necesidad que tienen las personas en duelo es la de SENTIRSE SEGUROS  al compartir un espacio tan íntimo de su vivencia personal.


Las personas que acompañamos a personas que han sufrido la perdida de un ser querido o algún otro evento de gran complejidad a nivel emocional debemos de tener en cuenta algunas reglas básicas para poder ofrecer ese espacio de seguridad y que nuestros pacientes no abandonen el tratamiento y logren conseguir buenos resultados.


Factores a tomar en cuenta:


Especialización.

Al día de hoy, ya no es una excusa la falta de programas con el fin de especializarse. Acompañar a pacientes de forma voluntaria, a sus familiares o desarrollar grupos de ayuda mutua para casos de poca complejidad puede darse como resultado de un pequeño curso o diplomado de formación. Sin embargo el manejo de grupos específicos de casos en riesgo o de terapia (no consejería) para casos de duelo complicado requiere un nivel de especialización mucho mayor, psicoterapeutas especializados deben estar a cargo de este tipo de servicios. Al día de hoy en varios países de habla hispana como México, Perú y España existen programas de formación (postgrados) que tienen como base no tan solo un marco terapéutico específico sino que además trabajan desde una marco clínico y científico apropiado.

Temporalidad

Una intervención debe de utilizarse en el momento adecuado para el cliente adecuado. “Seek the right intervention in the right moment” comenta el reconocido psicoterapeuta Bob Neimeyer, lo cual refuerza Alba Payás (terapeuta más emblemática de la psicoterapia de duelo en España) “la terapia de duelo no es café para todos” explicando en su programa de formación sobre la importancia de intervenir de forma apropiada respetando el momento en el que se encuentra el doliente en su proceso.

El uso de cartas terapéuticas, de la silla vacía o de otras técnicas que pueden ser utilizadas en el proceso de duelo está sobre explotado entre los terapeutas que al día de hoy intervienen en dichos casos. Éste, aunque no lo pareciera, es uno de los motivos más importantes de deserción y/o falta de resultados positivos en el proceso terapéutico por utilizarse en un momento inadecuado. Estas intervenciones pueden ayudar EN algunos, sin embargo no son ni necesarias, ni utilizables con cada uno de nuestros pacientes.

Trabajo personal

Un terapeuta de duelo no es solamente una persona que vivió y aprendió de una pérdida, es una persona que a lo largo de los años ha “revisitado” psicológicamente su historia de pérdidas, ha trabajado lo necesario sus necesidades relacionales y reconocido su estilo de vinculación, es un profesional que ha desarrollado un estilo personal de trabajo basado en sus características personales y su marco terapéutico.

Es como debe de serlo cualquier terapeuta una persona responsable por su bienestar personal que además de recibir supervisión por parte de otro profesional, recibe también de forma constante apoyo terapéutico.



No juicio

La forma de vivir el duelo de cada persona es el resultado de muchos factores, tanto de cómo sucedió la muerte, como las características de personalidad, etc. Nadie, absolutamente nadie vivirá un duelo de la misma forma. No juzgar y respetar la forma en que una persona responde ante la pérdida de alguien o algo  realmente significativo es de máxima importancia para que la persona sienta que está siendo acompañada de la forma que lo necesita. Si una persona se siente juzgada, se retraerá y no compartirá su sentir y todo aquello que durante el proceso de su duelo pueda estar viviendo y en este sentido entendiendo el duelo como el resultado de la pérdida de una relación, no será posible recolocar el vínculo con lo perdido, ni integrar todo aquello que a nivel emocional, cognitivo, somático y espiritual conlleva la pérdida.

El duelo es relación, el duelo necesita que alguien más esté con nosotros para compartir, para proteger y para acompañar. Así, en este contexto de SEGURIDAD (que en muchas ocasiones la propia familia o amigos brindan) cualquier persona será capaz de hacer frente a su dolor, podrá compartir y con esto encontrar el camino para hacer frente a la situación vivida…


Finalmente comentar que en países como México y algunos otros de América Latina la necesidad de profesionalizar es enorme, luchemos para que cada día la psicología, el trabajo social, la enfermería y algunas otras profesiones que intervienen en el bienestar psicológico y físico de nuestra sociedad reciban el reconocimiento que merecen. Para esto hemos de luchar cada día de forma constante y aguerrida para llevar a cabo nuestro trabajo con más disciplina y dentro de un contexto mejor.  

Gracias por leer este artículo. Agradecería tus comentarios y si te fue de ayuda lo compartas con personas a quienes pueda interesarles o beneficiarles.



“La gente mira las cosas y pregunta: ¿Por qué?
Yo prefiero ver las cosas como podrían ser y preguntar:
¿Por qué no?”  
                                                                                          adaptado de G.B. Shaw.



Adrián Chaurand.